Espantapitas
Es curioso lo que las modas y las tendencias pueden acaparar de mentes jóvenes, yermas y ávidas de una guía que marque su camino. Y hace ya algún tiempo que lo alternativo, lo "hippie", los "perroflautas" están de moda otra vez, eso sí, muy alejados de los valores que pregonaban en los 60. Ahora se lleva la ropa, el estilo, perro de "marca", pero con la visa oro en el bolsillo.
La prueba fue el Espantapitas el viernes 31 de Agosto. Miles de jóvenes se apiñaron y desbordaron a Vera y a la organización del festival por su masiva afluencia, para ver a uno de esos iconos del movimiento: Manu Chao. Es una buena noticia en principio, pero ese festival no estaba preparado para tal avalancha. De todas formas, es una gran experiencia asistir a estos eventos y disfrutar de buena música que fusiona sonidos de todos los continentes, aunque pagues el precio de la aglomeración y la garganta seca.
La globalización tiene estas cosas, lo minoritario crece exponencialmente y aumenta su calibre.
Y por cierto, la gente del Poniente, para otra cosa no, pero para eventos musicales, se mueve...
¿Faltó alguien?